Reto: Un banco desea mejorar su oferta de servicios para clientes empresariales, específicamente aquellos con un alto volumen de efectivo. Los comercios enfrentan desafíos al manejar grandes cantidades de efectivo y necesitan una solución que les permita ingresar su dinero de manera segura antes de que sea recogido por el transporte de valores. Además, el banco busca facilitar el flujo de caja para estas empresas y aumentar la atracción de nuevos depósitos.
Solución: Se implementaron bóvedas digitales que permiten a los clientes empresariales ingresar efectivo de forma segura. Estas bóvedas están integradas con el sistema bancario, lo que permite que el dinero ingresado se refleje instantáneamente como un depósito en la cuenta de la empresa. Esto significa que los comerciantes pueden acceder a sus fondos de manera inmediata, mejorando así su flujo de caja. Además, se proporciona una interfaz intuitiva para que los usuarios gestionen sus depósitos y realicen un seguimiento de las transacciones.
Resultados: La integración de las bóvedas digitales resultó en una mejora significativa en la satisfacción del cliente y en la eficiencia operativa. Los comercios reportaron una mayor facilidad para gestionar su efectivo y un flujo de caja optimizado, lo que les permitió invertir más en sus operaciones. Por su parte, el banco experimentó un aumento en la captación de depósitos pasivos, fortaleciendo su relación con los clientes y posicionándose como un líder en innovación en servicios bancarios para empresas.